La publicación del ‘Informe de aprendizaje en el lugar de trabajo de 2023: Construyendo el futuro ágil’ desarrollado por LinkedIn Learning, ofrece una foto actualizada de la gestión del talento en las empresas, con las personas y sus habilidades ubicadas en el centro del éxito organizacional.
Uno de los primeros análisis que efectúa el reporte apunta a los principales enfoques del área de aprendizaje y desarrollo para 2023:
Hace años que venimos predicando que ninguno de estos cuatro pilares claves de una estrategia de gestión del talento puede faltar en cualquier proyecto formativo. Menos aún en tiempos dinámicos, inciertos y de máxima competitividad, como los actuales.
Hoy las capacitaciones deben optimizarse, personalizarse y apuntar a las necesidades específicas del negocio, sin perder de vista que si dejamos de lado el mindset corporativo resultará muy complejo llevar adelante entrenamientos efectivos.
El informe de LinkedIn Learning considera que el éxito organizacional depende del éxito de las personas, precisando que esta simple verdad guía el diseño de las experiencias de los empleados, desde su incorporación hasta su salida, con las necesidades humanas en el centro.
Con capacitaciones que logren transferir las competencias necesarias al puesto de trabajo, para que puedan ser aplicadas con eficiencia y efectividad a las tareas propias de cada colaborador, se estará contribuyendo a mejorar el desempeño personal y colectivo.
Como consecuencia de ello, los empleados estarán más seguros de sus capacidades y tendrán más garantías sobre la posibilidad real de adaptarse a los cambios que propone la actual transformación productiva y digital. Mientras que las compañías mejorarán sus niveles de retención de talento y estarán más cerca de lograr y superar sus objetivos de negocio.
Recalculando habilidades críticas
En este contexto, es importante tener en cuenta -como señala el reporte- que las habilidades exigidas por el mercado laboral cambiaron en un 25% desde 2015 y para 2027, se espera que este número se duplique.
Es decir, que 3 de cada 10 habilidades consideradas esenciales hace 8 años ya no son críticas, y 5 de ellas dejarán de tener relevancia en cuatro años. En paralelo, aparecerán habilidades críticas que quizá hoy desconocemos o que desconocíamos hasta hace unos pocos meses atrás (como la capacidad para generar prompts efectivos para la inteligencia artificial generativa).
Lo cual obliga a actualizar, adaptar e incluso reconvertir a los equipos de trabajo, en ciclos temporales cada vez más estrechos.
La irrupción de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial generativa, sin duda acelerarán el proceso. Y en saber aprovecharlas residirá gran parte del éxito de una estrategia de gestión del talento efectiva.
Previendo lo que ocurrirá en un futuro mediato y volviendo al estudio de Linkedin Learning, el 89% de los profesionales de L&D coinciden en que desarrollar de manera proactiva las habilidades de los empleados para hoy y mañana, ayudará a navegar por el futuro cambiante del trabajo.
Por su parte, los líderes empresariales reconocen que la estrategia de personas es fundamental para el éxito. 82% está de acuerdo en que la función de recursos humanos es más crítica ahora que nunca y que es el momento de acelerar el viaje hacia la mejora y actualización de habilidades a gran escala.
No obstante, el informe señala que el impulso aún es lento y qué, para lograr una verdadera agilidad en la incorporación de habilidades, las organizaciones también querrán pensar en cambios culturales que abran nuevos caminos.
En próximos artículos iremos abordando diversos indicadores que aporta el estudio de Linkedin Learning, para continuar profundizando en la transformación de la gestión del talento.
Desde élogos ya estamos trabajando con empresas en Chile y otros países de América Latina, para abordar estos desafíos con éxito, apoyándonos en diversas tecnologías para lograrlo.
Además de acelerar la transformación digital de las organizaciones, la pandemia ha llevado a las empresas a impulsar la reconversión profesional de sus empleados (reskilling), ya sea sumando más funciones o modificando algunas de ellas a partir de los requerimientos que han ido surgiendo en el desarrollo de la operación.
El mundo cambió drásticamente en los últimos meses, provocando una profunda transformación en las empresas y en las personas, pues todos hemos tenido que adaptarnos a las nuevas dinámicas laborales y a las nuevas formas de producir, de comunicarnos, de capacitarnos y de vender.
Durante los últimos doce meses se aceleraron numerosos procesos de transformación que modificaron las dinámicas corporativas. En este contexto, para este 2021, la adaptación al cambio dejó de ser la principal decisión estratégica que puede tomar una compañía para convertirse en una necesidad.
En tiempos como las actuales, la capacidad de gestionar el talento en forma ágil, dinámica y flexible, ofrece a las empresas y sus equipos la posibilidad de adaptarse al cambio, mejorar la productividad, ser más competitivos y aspirar a lograr mejores resultados en un mercado caracterizado por la incertidumbre.
Mediciones recientes indican que estamos frente a una preocupación, pero también ante un desafío a resolver, en el marco del acelerado proceso de transformación digital que impacta a todas las industrias en términos de necesidades de capacitación y adaptación a las nuevas exigencias del mercado.
Ya lo decía Charles Darwin: no es el más fuerte de las especies el que sobrevive, tampoco es el más inteligente. El que sobrevive es el más adaptable al cambio.