Mostrando artículos por etiqueta: Tecnología

Cuando la incertidumbre crece en los mercados, una respuesta común en las empresas no preparadas es que los equipos se paralizan. 

Vivimos en un mundo Vuca, un acrónimo en inglés que resume a un entorno marcado por la volatilidad (V), la incertidumbre (U), la complejidad (C) y la ambigüedad (A).

Un mundo inmerso en un proceso dinámico de transformación, que requiere adaptarse constantemente a cambios en las formas de consumo, producción, comercialización y distribución. También a las nuevas modalidades de trabajo y a la incorporación de tecnologías emergentes.

La pregunta clave ante este contexto es si nuestros colaboradores cuentan con la información y preparación necesaria para desenvolverse en esta situación claramente compleja.  Si no poseen las capacidades para hacerlo, esta carencia impactará en su desempeño profesional y en la productividad, competitividad y los resultados de las empresas para las que trabajan.

Esta adaptación continua –imperiosa y absolutamente imprescindible-, debe gestionar diversos desafíos como la resistencia al cambio, las dificultades propias de incorporar una innovación, o la necesidad de sumar procesos y nuevas formas de gestionarlos. 

Incluso puede requerir cambiar el foco de una posición laboral y como consecuencia de ello, incorporar nuevas competencias.

En el marco de esta transición, las estrategias de capacitación son determinantes para trabajar la incorporación de conocimientos y habilidades, y producir los comportamientos que requiera el negocio.

Además, de desarrollar las capacidades para gestionar los desafíos y aprovechar las oportunidades que trae el cambio, generando una mentalidad flexible y resiliente.

En este punto, también es importante tener en cuenta, cuál es el nivel de adaptación con las tecnologías que se incorporan a los procesos de aprendizaje. Con este objetivo, la Association for Talent Development (ATD) efectuó una encuesta en LinkedIn que arrojó los siguientes resultados:

  • 55% se percibió como Early Adopter, es decir, adoptadores tempranos.
  • 25% se consideró innovador
  • 16% manifestó hacerlo al mismo tiempo que la mayoría 
  • 3% se reconoció rezagado.

Lo interesante es que, a medida que se acelera la incorporación de nuevas tecnologías, la apertura de las organizaciones y los profesionales al cambio es cada vez mayor.

De hecho, una reciente encuesta realizada por Accenture a 4.054 personas a través de LinkedIn, reveló que el 49% acepta el cambio en sus organizaciones en relación a nuevos procesos y tecnologías, mientras que el 34% de los encuestados se manifestó abierto al cambio. Es decir, el 83% de las respuestas fueron favorables. Del 17% restante, el 10% duda ante el cambio y solo el 7% se resiste a la transformación.

Por otra parte, la actitud de los colaboradores también es positiva en relación a la incorporación de nuevas competencias. 

Según los resultados del reporte Global Workforce of The Future 2023 de Adecco, el 73% de los trabajadores indicó que tienen la intención de permanecer con su empleador actual, “siempre y cuando tengan acceso a oportunidades de formación y crecimiento profesional”.

De esta manera, las capacitaciones cumplen un doble propósito:

  • Aportar los conocimientos y habilidades que requiere una posición y un colaborador en particular.
  • Fortalecer la fidelización de los recursos humanos.

Debemos estar atentos y enfocar los esfuerzos en desarrollar la capacidad de adaptación y formación de nuevas competencias para nuestros equipos.

 

"A medida que la economía se desacelera, concentrémonos en las habilidades del futuro". La frase corresponde al título de un artículo de Josh Bersin, que si bien refiere a la actualidad de los Estados Unidos, podría aplicarse a la situación actual de Chile y otros países de América Latina.

En su análisis, el experto en desarrollo profesional y recursos humanos -cuyos artículos habitualmente se publican en Forbes, Harvard Business Review, HR Executive, The Wall Street Journal y The Financial Times-, destaca que frente a la desaceleración del crecimiento del PIB, se está produciendo una transformación a muy largo plazo de empresas industriales con una alta demanda de mano de obra, que tienden a necesitar menos “trabajadores” y más empleados altamente capacitados.

El creador de Josh Bersin Company, Josh Bersin Academy y Big Reset relata que luego de reunirse con más de 20 empresas grandes de Europa, pudo percibir que todas ellas están invirtiendo en:

  • Desarrollo de los empleados.
  • Capacitación.
  • Movilidad interna.
  • Programas para mejorar la productividad. 

En paralelo, líderes de RR.HH. con los cuales se reúne habitualmente, le dijeron que están invirtiendo en habilidades de “gestión del cambio” y “transformación empresarial”.

Al respecto Bersin advierte que el conjunto más importante de skills que necesitamos es la “capacidad de impulsar el cambio”. Haciendo hincapié en la importancia de hacer foco en las personas que pueda impulsar, liderar, inspirar y crear cambios dentro de la organización. 

Si un profesional, gerente o líder, realmente sabe cómo impulsar y ejecutar el cambio, estos ciclos económicos son giros inesperados y generalmente temporales en su carrera. Así lo expresa el especialista, en relación a la desaceleración de la economía, expresando que vivimos en un período en el que el valor económico de cada individuo se está disparando para las empresas. 

"Invierta en su gente y en usted mismo y le irá bien a medida que la economía cambie", asegura Josh Bersin.

En efecto, invertir en la gestión y capacidad de adaptación a los cambios es crucial, frente a contextos inciertos y a la naturaleza dinámica de la economía y los mercados. 

Más aún, ante la creciente incorporación tecnológica, que no solo produce un efecto de transformación digital en las empresas, sino también un impacto en las modalidades de trabajo y en las formas de producir, comercializar y distribuir.

La agilidad, la adaptación y la resiliencia, forman parte de aquellas habilidades que favorecen una gestión del cambio efectiva, que asegure que todos los colaboradores de una compañía estén alineados con sus objetivos estratégicos, fomentando una cultura de superación y mejora continua.

Las empresas que invierten en estrategias sólidas de gestión del cambio pueden implementar nuevos procesos y tecnologías de manera más eficiente. Lo cual no solo mejora el compromiso de los empleados, sino que también aumenta la capacidad de la organización para mantenerse competitiva. 

Una empresa que desarrolla en sus colabores habilidades de adaptación al cambio no solo facilita las transiciones en contextos económicos adversos, sino que también fortalece la capacidad para prosperar en entornos de negocios en constante transformación y la prepara para asumir los desafíos que deparará una futura reactivación.

 

El 48% de los líderes de recursos humanos considera que la escasez de habilidades es una de las principales amenazas para su negocio.

Así lo expresan los resultados del reporte de Mercer, 'Workforce 2.0 - Global Talent Trends 2024'.

De hecho, el 51% dice que entre los factores que darían mayor impulso a la productividad organizacional, se encuentran el upskilling y reskilling de los colaboradores 

Es decir, la mitad de los responsables de RRHH son conscientes de la necesidad de actualizar a sus equipos con las skills esenciales que demanda cada sector en particular.

Más aún en tiempos dinámicos como los actuales, en los que la creciente incorporación de tecnologías emergentes está modificando la forma de producir, comercializar y distribuir bienes y servicios. Un escenario en el que la capacidad de adaptación es fundamental para las compañías.

Como señala el informe de Mercer, cuando la naturaleza del trabajo cambia rápidamente y las habilidades demandas no están disponibles en el mercado laboral, desde el área de RRHH se debe adoptar un enfoque de “construcción desde dentro”.

Las empresas de alto crecimiento ya están viendo el retorno que producen las políticas de upskilling y reskilling. Lo que las ha llevado a desarrollar prácticas de desarrollo del talento ágiles.

Según nuestra experiencia, se deben generar instancias formativas que permitan incorporar habilidades para resolver necesidades específicas del puesto de trabajo. Siempre con orientación al logro de resultados.

Puntualmente, el reporte 'Workforce 2.0 - Global Talent Trends 2024', analiza los enfoques que han tenido mayor éxito para garantizar el desarrollo interno de las habilidades que requiere cada organización.

Entre ellas se destaca el aprendizaje experiencial. Un enfoque formativo basado en la premisa de que las personas aprenden mejor a través de la experiencia directa. 

En lugar de centrarse en la teoría, este método enfatiza la participación activa en actividades prácticas. Una formación en un ambiente simulado permite experimentar y practicar. En élogos tenemos vasta experiencia en aplicación de entrenamiento basado en casos.   

Por ejemplo, a través de la gamificación o inmersión, donde los participantes se involucran en situaciones tomadas de casos reales en las que aplican conceptos y habilidades, resuelven problemas concretos vinculados a sus responsabilidades y objetivos laborales, y reflexionan y entrenan sobre sus acciones, decisiones y resultados.

Otro enfoque muy utilizado en los programas de capacitación corporativa es el microlearning, e incluso el nanolearning.

Como expresa el reporte 'Workplace Learning Report 2024' de LinkedIn Learning, 47% de los equipos L&D planean implementar programas de microlearning en 2024, considerando que se trata de un método de aprendizaje atractivo, personalizado y flexible, que se incorpora al flujo de trabajo, ayudando a las personas a resolver problemas específicos.

Caracterizado por lecciones breves y focalizadas, permite asimilar información y desarrollar habilidades de manera efectiva, al evitar la sobrecarga cognitiva. 

Su formato flexible y accesible facilita el aprendizaje en cualquier momento y lugar, adaptándose a los horarios y ritmos individuales.

Además, el microlearning promueve la motivación y el compromiso al proporcionar objetivos claros y alcanzables. Mientras que su naturaleza modular permite una actualización rápida y sencilla.

Para concluir, rescato una frase de Geraldine Murphy, Gerente de Experiencia de Aprendizaje Global en The Heineken Company, plasmada en el informe de LinkedIn Learning: "Los profesionales de L&D deben ayudar a los empleados a priorizar tres cosas: habilidades para el trabajo que hacen ahora, habilidades para el trabajo que desean realizar en el mañana y habilidades que les servirán de por vida”.

La primera de estas prioridades permitirá a las empresas generar las condiciones para lograr sus objetivos. La segunda, preparará a los colaboradores para adaptarse a las demandas futuras de su puesto de trabajo y les aportará opciones para aspirar a un crecimiento profesional dentro de la compañía. La tercera, tenderá a fomentar la fidelización de los equipos y favorecerá la reducción de la rotación laboral.

 

El Foro Económico Mundial publicó en estos días el informe Global Gender Gap Report 2024, que incluye el Índice Global de Brecha de Género y la evolución de la paridad de género en cuatro dimensiones clave. Entre ellas, la adquisición de competencias orientadas al mercado laboral, identificada en el estudio como la dimensión de logros educativos.

Es interesante tener en cuenta los resultados del reporte, principalmente por parte de las compañías comprometidas con alcanzar una mayor inclusión laboral y avanzar en el desarrollo de políticas corporativas orientadas a mejorar la equidad de género dentro de sus equipos.

“Las diferencias de género en los perfiles de habilidades continúan, distorsionando la forma en que hombres y mujeres participan en la transición tecnológica y las posibilidades que tienen en el futuro del trabajo”, apunta el estudio desarrollado por el Foro Económico Mundial.

Un dato interesante a considerar es que la proporción de mujeres con habilidades STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) aumentó desde el 2016 hasta la fecha, del 24,4% al 27,1%.

En paralelo, los roles laborales STEM también vienen aumentado desde 2016, aunque aún las mujeres siguen estando subrepresentadas en este segmento a nivel mundial, alcanzando apenas el 28,2%, en comparación con el 47,3% en sectores no STEM.

Desde una perspectiva de aprendizaje en línea, indicadores de Coursera mencionados por el Foro Económico Mundial sugieren que la paridad de género es más alta en las inscripciones para:

  • Desarrollo de habilidades de colaboración y liderazgo.
  • Enseñanza y tutoría.
  • Empatía y escucha activa.
  • Liderazgo e influencia social.

Aunque aún es baja en cursos de IA y big data (30%), programación (31%), y redes y ciberseguridad (31%).

Mientras que datos de una encuesta de PwC referenciada por la investigación del Foro Económico Mundial revelan que la mayoría de los empleados, hombres y mujeres, buscan activamente oportunidades para ampliar su conjunto de habilidades.

Un dato relevante es que la mayor parte de ellos posee una buena comprensión de cómo se transformarán sus requisitos laborales en los próximos años cinco años.

Sin embargo, las diferencias de género son evidentes en la percepción de la demanda. Al punto que las mujeres estiman que las habilidades digitales, analíticas y de sustentabilidad serán menos determinantes para sus trayectorias profesionales actuales durante el resto del actual decenio.

El informe también señala que existe una brecha de género en la percepción de oportunidades para adquirir las habilidades del futuro del trabajo.

A medida que hombres y mujeres pasan de la escolarización al mundo laboral, sus habilidades siguen siendo moldeadas y valoradas de manera diferente.

Es en este espacio donde la capacitación puede desempeñar un papel clave en la valorización de todas las habilidades necesarias para el mercado laboral, equilibrando la asimetría de género actual. Incentivando a hombres y mujeres a participar sin prejuicios de género en todo tipo de trabajo.

Como lo muestran los resultados del The Global Gender Gap Index de este año, la escala y velocidad del progreso son profundamente insuficientes para lograr la igualdad de género para 2030.

Dotar de recursos a los esfuerzos por la igualdad de género es crucial para:

  • Evitar el retroceso de la evolución lograda con tanto esfuerzo.
  • Garantizar los caminos hacia el crecimiento y la prosperidad.

“Lograr la igualdad de género exige que los gobiernos y las empresas cambien tanto los recursos como las mentalidades hacia un nuevo paradigma de pensamiento económico, donde la paridad de género se adopte como una condición para un crecimiento equitativo y sostenible”, aseguran desde el Foro Económico Mundial. Una visión que compartimos en élogos.

Para obtener mayor información, recomiendo leer el informe (en inglés), que compara la paridad de género en 146 economías, proporcionando una base para el análisis de la evolución de la paridad de género en dos tercios de las economías del mundo: http://wef.ch/gendergap24

 

La adquisición de competencias digitales es uno de los principales retos que tienen las organizaciones, para poder consolidar sus proyectos de transformación digital. Principalmente a partir del aumento de la automatización de procesos, que está obligando a reconvertir profesionalmente a muchos colaboradores.

Como señalaba una investigación de Manpower Group titulada ‘La Nueva era del Potencial Humano’, para 2025 el 50% de todos los colaboradores necesitarán volver a capacitarse en términos tecnológicos.

De hecho, hoy prácticamente ninguna posición corporativa está exenta de interactuar con sistemas y aplicaciones.

En un entorno laboral cada vez más digitalizado, las habilidades en áreas como el manejo de software y herramientas digitales, el análisis de datos y la ciberseguridad son esenciales para mejorar la productividad, la eficiencia y la competitividad de los profesionales.

Además, la capacidad de adaptarse y utilizar tecnologías emergentes como la inteligencia artificial y el aprendizaje automático permite a los trabajadores no solo mantenerse vigentes para sus roles actuales, sino también prepararse para las demandas futuras del mercado laboral en constante cambio.

Una de las competencias que se vislumbran como críticas para los profesionales, es la adquisición de habilidades vinculadas a la inteligencia artificial. Como suele decirse, la IA no es la que te va a quitar el trabajo, sino aquella persona que incorporó la capacidad de poder gestionarla.

Prueba de ello es que el 80% de los empleados dice que quieren aprender habilidades de IA para potenciar sus carreras. Así lo revela el informe ‘Workplace Learning Report 2024’, elaborado por LinkedIn.  

No obstante, solo el 38% de los ejecutivos ayudan a sus empleados a adquirir conocimientos de IA. Los datos corresponden a Estados Unidos, pero son perfectamente replicables en América Latina. De hecho, en Chile, la mayoría de las empresas aún no están convencidas de avanzar en este sentido.

De todas maneras, la aceleración que experimenta la inteligencia artificial, en especial en los procesos automatizados, seguramente lleve a las compañías a reconsiderar su posición actual en el corto o mediano plazo.

En el futuro es factible que las capacidades de gestión de la IA de la fuerza laboral de una compañía incidan en su competitividad de una manera determinante. En el informe ‘Global Talent Trends 2024’ de Mercer, ya se establece como quinta prioridad para el área de RRHH de las empresas rediseñar el trabajo para incorporar IA y automatización.

Probablemente un buen comienzo sea incorporar la IA a los procesos de capacitación, para favorecer a los procesos de transformación cultural que permitan asimilar la evolución tecnológica de la organización.

Por ejemplo, a través de cursos que aporten competencias vinculadas a cómo optimizar y potenciar el desempeño con inteligencia artificial o para aprender su aplicación en los procesos diarios.

El siguiente nivel sería incorporar algoritmos de IA a las plataformas formativas, para analizar datos sobre el rendimiento y las preferencias de los estudiantes, generando recomendaciones de cursos y planes o adaptando el contenido y la metodología de aprendizaje de manera individualizada.

Además, la IA ya permite la creación de experiencias de aprendizaje interactivas y envolventes, como simulaciones realistas o la utilización de asistentes virtuales, que facilitan la retención del conocimiento y la práctica de habilidades, incluso interactuando con clientes en formato chatbot.

Al utilizar análisis predictivos, la IA también puede identificar con mayor precisión áreas de mejora y sugerir recomendaciones personalizadas para optimizar el proceso de aprendizaje. Lo que resulta en una capacitación más efectiva y orientada a resultados.

Así se podría mejorar la eficiencia, la personalización y el engagement de las capacitaciones.

Ver a los avances tecnológicos como una amenaza, será un obstáculo de magnitud para adaptarse al mundo que viene y un problema para la productividad y competitividad de las empresas.

Por el contrario, entenderlos como una oportunidad para la optimización del tiempo, para la facilitación de las tareas laborales y para la incorporación de mayor valor agregado, colocará a la fuerza laboral en una mejor posición de adaptación en relación a la transformación digital.

 

La creciente utilización de la realidad virtual en programas de capacitación se debe a su aptitud única para proporcionar experiencias inmersivas y prácticas, superando las limitaciones de los métodos tradicionales de entrenamiento.

Las simulaciones realistas permiten a los empleados enfrentarse a situaciones del mundo real en un entorno controlado:

  • facilitando la práctica sin riesgos
  • mejorando la transferencia de habilidades

Esta tecnología también aborda la necesidad de formación en entornos peligrosos o costosos, donde la práctica directa puede ser difícil o prohibitiva.

Además, la personalización del aprendizaje, el incremento en los niveles de retención de conocimiento y habilidades, la mejora del compromiso con el proceso de entrenamiento, y la capacidad para transferir competencias al puesto de trabajo, hacen de esta tecnología una aliado clave en la mejora del desempeño individual y colectivo.

Por otra parte, es importante destacar que un proyecto de realidad virtual no necesariamente tiene que involucrar gafas costosas, e incluso puede prescindir de ellas y continuar siendo efectivo.

De hecho, hoy se pueden implementar iniciativas de RV más accesibles desde la inversión, utilizando tablets para interactuar con escenarios 3D que se pueden girar y recorrer como en una película, interactuando con objetos o desarrollando acciones puntuales. El sistema irá marcando cuando se actúa correctamente o señalando las decisiones equivocadas.

En definitiva, la realidad virtual se está consolidando como una herramienta efectiva, que no solo transforma la forma en que los empleados adquieren habilidades, sino que también ofrece un enfoque más atractivo para el desarrollo profesional.

6 razones por las cuales resultan convenientes los entrenamientos con RV

La implementación de la realidad virtual en los procesos formativos de una empresa puede aportar diversos beneficios que superen a los métodos tradicionales, y permitan acceder a otro nivel de capacitación.

Entre razones por las cuales una empresa debería considerar la adopción de la realidad virtual en su estrategia de formación, se destacan las siguientes:

1) Experiencia inmersiva

La realidad virtual proporciona experiencias de aprendizaje inmersivas en las cuales se pueden simular situaciones del mundo real.

Esto es particularmente valioso en entornos donde la práctica directa puede ser costosa, peligrosa o difícil de replicar. Tal es el caso de la formación en habilidades prácticas, manejo de equipos o maquinaria, y la respuesta ante situaciones de emergencia.

2) Aprendizaje basado en escenarios

La RV permite la creación de escenarios de capacitación realistas y específicos para la industria. Incluso, permite trabajar con gemelos digitales, que son réplicas exactas de espacios de trabajo, maquinarias y herramientas.

Los empleados pueden enfrentarse a desafíos y tomar decisiones en un entorno virtual que refleje fielmente su lugar de trabajo.

De esta manera, se mejora la transferencia de habilidades a situaciones del mundo real, y se resguarda la seguridad de las personas hasta que estén preparadas para interactuar con el entorno de trabajo y vehículos o dispositivos asociados.

3) Seguridad

En sectores donde la preservación de la seguridad de trabajo se enfrente a desafíos constantes y muchas veces extremos (industria manufacturera o sector salud), la realidad virtual puede simular situaciones peligrosas o procedimientos complejos, sin riesgos para la seguridad del empleado.

Esto permite la práctica y el perfeccionamiento de habilidades en un entorno controlado, con la posibilidad de cometer errores sin impacto en la vida real de los colaboradores u otras personas.

4) Personalización del aprendizaje

La RV permite adaptar la formación a las necesidades individuales de los empleados, con un nivel de personalización muy avanzado.

Cada colaborador puede avanzar a su propio ritmo y repetir escenarios cuantas veces sea necesario, para mejorar sus habilidades.

5) Mejora del compromiso y la retención

La naturaleza inmersiva de la realidad virtual puede aumentar el compromiso de los empleados y mejorar la retención de la información.

Así, los empleados interactúan con el contenido de aprendizaje de una manera más activa y participativa. Al punto que podemos hablar de experiencias reales.

6) Versatilidad

La RV puede utilizarse en una amplia gama de industrias, para la formación en habilidades técnicas, el desarrollo de soft skills y la adquisición de hábitos puntuales.

Su amplitud de aplicación hace de esta tecnología, una herramienta versátil y adaptable a diferentes necesidades de entrenamiento.

¿Cuándo se debería implementar RV en la capacitación corporativa?

La evaluación de incorporar un proyecto de realidad virtual en el marco de una estrategia de capacitación empresarial, debería estar asociada a las siguientes  necesidades:

  • Aumentar la velocidad de entrenamiento, y mejorar el time to market.
  • Optimizar las instancias formativas del personal, y los niveles de retención de los colaboradores.
  • Desarrollar una experiencia que tendrá un impacto directo en los niveles de desempeño y en los resultados de la compañía.
  • Disminuir los riesgos económicos y de seguridad, cuando la práctica directa podría resultar costosa o peligrosa.

Sectores como la industria manufacturera, el retail, la minería y la salud, donde la simulación de escenarios específicos es crucial, encuentran en la realidad virtual una solución invaluable.

Además, cuando se busca personalización del aprendizaje para adaptarse a las necesidades individuales de los empleados, o cuando la formación implica habilidades prácticas que requieren práctica repetida, esta tecnología se constituye en una elección estratégica para mejorar la eficiencia y la efectividad de los programas de capacitación corporativa.

 

 

En las próximas décadas, al 2023 se lo recordará como el año en el cuál irrumpió la inteligencia artificial interactiva. Sin duda una de las novedades más disruptivas en la historia de la humanidad, después del surgimiento de Internet.

Se trata de una tecnología que impacta en todos los aspectos de la vida de los seres humanos de una manera profundamente trasversal, modificando la manera en la que nos comunicamos, trabajamos, creamos, producimos y accedemos a la información.

En un cambio de época como la actual y en este punto de evolución, podríamos decir que la Cuarta Revolución Industrial es un combo o un paquete de revoluciones, todas interactuando y potenciándose entre sí.

Salvo que el desarrollo que está experimentando la inteligencia artificial y su impacto en el sector productivo, pueda enmarcarse en lo que podríamos denominar una Quinta Revolución Industrial. El tiempo lo decidirá.

Un dato curioso en este proceso, es que la inteligencia artificial generativa y particularmente ChatGPT, pasó a ser de accesibilidad y disponibilidad pública, en forma casi inmediata al momento de su creación (en la primera versión que conocimos en noviembre de 2022). 

Al igual que ocurrió cuando transitamos de un mercado basado en el trueque a la comercialización y monetarización de bienes y servicios, o cuando la fabricación artesanal dejó paso a la manufactura en serie, la IA implica un cambio de fuerte impacto y reacomodamiento general.

Las consecuencias del uso de la IA serán similares a aquellas transformaciones, con la particularidad de estar ocurriendo en nuestro mundo cotidiano. En este mismo momento, personas y organizaciones estamos escribiendo la historia del futuro de la humanidad.

Como ocurre frente a cualquier proceso de cambio, el temor y la resistencia comienzan a emerger como comportamientos naturales de las personas.

Por ello es importante que trabajemos en la transformación cultural, en la capacidad de adaptarnos y ser flexibles, para contar con la agilidad necesaria que nos permita sumarnos a las dinámicas de un nuevo mundo que surge con fuerza, sin pedir permiso y de un modo determinante.

En este proceso de aceptación, en el que debemos convencernos que nada volverá a ser como antes, la adquisición de competencias digitales se vislumbra como un factor crítico para cualquier persona laboralmente activa o con aspiraciones de insertarse en el mercado laboral.

Para las empresas, la transformación digital se consolida como un imperativo cada vez más pronunciado. Aunque es importante destacar que la tecnología solo es un medio, y que la verdadera transformación se está produciendo en la evolución y reconversión de los procesos.

En este contexto es importante mantener una mirada esperanzadora, pensando en cómo podemos aprovechar estas nuevas innovaciones, para mejorar nuestra calidad de vida y la forma en la que trabajamos.

Soy un optimista a ultranza y un enamorado de la vida y de los desafíos. Confío en la humanidad y en que ajustaremos la IA para mantener valores que privilegien el bien común y la prosperidad general.

El desafío que tenemos por delante tiene varias perspectivas:

  • Como personas tendremos que reinventarnos de forma constante y acostumbrarnos a nuevas realidades en nuestro día a día. La dinámica y el cambio constante serán parte de nuestra vida. 
  • Como empresas debemos adquirir rápidamente la inteligencia artificial y entrenar en nuevas y más competencias digitales a nuestros colaboradores.

Desde élogos estamos comprometidos con este proceso, apoyando a nuestros a clientes para que puedan recorrer con eficiencia el camino hacia la próxima etapa evolutiva de sus operaciones.

 

Empresas y personas estamos navegando a través de un cambio de época, por momentos turbulento, en ocasiones incierto, que nos interpela a reflexionar sobre cómo asimilamos y nos adaptamos a nuevos contextos y desafíos.

Entre los indicadores que permiten caracterizar las aguas que estamos recorriendo, se destacan:

  • la aceleración de la incorporación de tecnologías emergentes en las organizaciones, y su consecuente impacto en la forma de producir y operar,
  • la necesidad de articular la gestión de una amplia variedad de funciones laborales entre máquinas y personas,
  • las nuevas dinámicas de trabajo surgidas en los últimos años,
  • las nuevas expectativas de las personas y su forma de relacionarse con los ámbitos laborales,
  • las modificaciones que se están produciendo en la gestión empresarial a partir de las recurrentes crisis geopolíticas y económicas, locales e internacionales.

El nivel de disrupción actual exige la transformación de todas las compañías. Así lo sostiene el informe ‘La Reinvención total de la empresa’ de Accenture, en el que se plantean estrategias para alcanzar una nueva frontera del rendimiento.

Se trata de un reporte de alto interés para las organizaciones, donde se señala que la reinvención empresarial implica pasar de medir el liderazgo y la innovación digitales (en términos de líderes, liebres y rezagados), a evaluar a las compañías como Reinventores, Transformadores y Optimizadores.

Teniendo en cuenta que todas las estrategias a desplegarse exigen más tecnología y obligan a reconocer que precisamente la tecnología, es un factor crítico que seguirá definiendo los límites de lo posible. Y sin dejar de considerar que otro estudio realizado en 2022, reveló que siete de cada 10 iniciativas de transformación no cubren todas las expectativas de los líderes de negocio.

Lo interesante es que el 97% de los ejecutivos cree que la tecnología en general posee y seguirá teniendo un papel fundamental en su estrategia de reinvención y en los programas de transformación de su organización.

De hecho, una media del 40% de los ejecutivos en los tres grupos mencionados (Reinventores, Transformadores y Optimizadores) opina que la tecnología creció en importancia hasta convertirse en la máxima prioridad de los programas de transformación en los dos últimos años

Pero más allá del rol preponderante que tiene el factor tecnológico, como explica Nicolás Goldstein, Presidente ejecutivo de Accenture Chile, en una nota de opinión recientemente publicada en Forbes Chile, se trata de repensar completamente las cosas. “Cómo debemos crecer, operar, relacionarnos con el ecosistema y cómo crear valor”, advierte.

En este sentido, Goldstein manifiesta que se trata de un gran reto y una oportunidad, referenciando que la disrupción en los negocios creció un 200% en los últimos cinco años. Y entendiendo la disrupción como el nivel de volatilidad y cambio en las esferas económica, social, geopolítica, medioambiental, del consumidor y tecnológica.

Buenas prácticas para la reinvención continua

Volviendo sobre el reporte de Accenture, las prácticas que se adoptaron para fomentar una mentalidad de reinvención continua, son las siguientes (por orden de prioridad):

  1. Reevaluar la prioridad de iniciativas existentes y añadir nuevas iniciativas a la estrategia de reinvención como parte de procesos de planificación básicos (58%)
  2. Colaborar con partners de negocio para impulsar la innovación en todo momento (50%)
  3. Usar una metodología de innovación para generar ideas nuevas (40%)
  4. Colaborar con otras empresas que se han reinventado para aprender de su experiencia (39%)
  5. Recurrir a los empleados para generar ideas nuevas (38%)

Cada una de estas prácticas y todas ellas, implican gestionar una transformación cultural en las empresas e incluso trabajar sobre el mindset corporativo.

Como destaca el informe de Accenture, la reinvención total de la empresa no es tanto una forma de actuar, sino una forma de ser. “Es una fuerza que une a los ejecutivos y a todas las funciones y áreas de negocio, puesto que, por definición, su éxito depende de todos ellos”, apunta.

Agregando que la reinvención requiere nuevas capacidades y una comprensión más profunda de la tecnología, la gestión del cambio, la comunicación y la colaboración, para obtener resultados en menos tiempo.

Lo cual lleva a la necesidad de alinear a toda la empresa con esta visión. “Es importante comunicar el cambio y facultar al personal en todos los niveles”, aseguran desde Accenture.

¿Cómo adaptar a los equipos hacia el cambio y la reinvención?

Ya por fuera del informe que estamos analizando y en relación a la importancia de comunicar la reinvención que atraviesa cada organización, resulta fundamental considerar que para lograr un proceso de cambio efectivo que derrame en toda la organización, se deben desarrollar estrategias eficaces de gestión del talento.

Proyectos que alineen a los equipos en función de los cambios que se están impulsando y que modifican y modificarán estructuralmente a la empresa en todas sus dimensiones.

Desde élogos ya estamos apoyando a empresas chilenas y latinoamericanas en la consolidación de sus procesos de reinvención, acompañando el desarrollo de nuevas habilidades, adaptación al cambio y desarrollo de competencias digitales.

En este proceso entrenamos a los equipos con simuladores de realidad virtual, siempre atendiendo las necesidades de negocio del día a día de nuestras empresas clientes.

En síntesis, dándoles soporte en sus proyectos de capacitación transversales, a través de la incorporación de inteligencia artificial y realidad aumentada.

¡¡Adecuamos la formación a la cultura, realidad del negocio y presupuesto de cada cliente!!

 

Para Diego F. Angel-Urdinola (Umbrella Trust Funds - World Bank), la falta de formación adecuada para gestionar los riesgos industriales constituye uno de los factores determinantes para que se produzcan accidentes laborales.

Desde su perspectiva, el uso inadecuado de los equipos, la exposición limitada a técnicas de prevención de accidentes y la carencia de protocolos claros, constituyen causas que incrementan los niveles de riesgo laboral.

En este marco, sostiene que la realidad virtual (RV) es una alternativa prometedora para capacitar a los trabajadores sobre seguridad y prevención de riesgos, a fin de mitigar su incidencia, proporcionar una respuesta rápida y minimizar las víctimas.

Lo interesante de esta tecnología es que permite preparar a las personas para enfrentar emergencias y aprender a operar maquinaria de manera adecuada en entornos reales simulados.

En este sentido, Angel-Urdinola sostiene que los trabajadores pueden asimilar a través de estas simulaciones como experiencias ‘vividas’, adquiriendo conocimientos de larga duración y aplicables al puesto y el entorno laboral.

RV: un factor clave para transferir competencias al puesto de trabajo 

A partir de estas reflexiones y teniendo en cuenta las necesidades actuales de las empresas, y el contexto de oportunidad que tienen para la gestión del talento, analizamos algunos beneficios que la realidad virtual aporta a los procesos de capacitación corporativos:

  1. Inmersión total: sumerge a los empleados en un entorno virtual realista, permitiéndoles experimentar situaciones y escenarios simulados, acordes a los que eventualmente tendrán que enfrentar. Lo cual facilita el desarrollo de aprendizajes más profundos y memorables.

Al brindar la capacidad de practicar en un entorno inmersivo, sin incurrir en riesgos y con bajo estrés, la capacitación basada en RV da como resultado niveles de confianza más altos y una capacidad mejorada para aplicar realmente el aprendizaje en el trabajo.

  1. Aprendizaje práctico: los trabajadores pueden practicar habilidades y procedimientos en un entorno virtual sin riesgos ni consecuencias costosas en el mundo real. Esto es especialmente valioso para la capacitación en áreas como la seguridad laboral y la operación de maquinaria.

En efecto, las situaciones de emergencia o el manejo de maquinarias complejas, pueden ser difíciles de reproducir en la vida real. Sin embargo, la realidad virtual proporciona una solución efectiva de entrenamiento en escenarios realistas.

Como señalan desde Deloitte simular situaciones reales, o casos de uso habituales, permite reducir los riesgos en los procesos o procedimientos más críticos o peligrosos, ganando en la seguridad del empleado.

  1. Personalización: ofrece la posibilidad de adaptar la capacitación a las necesidades individuales de cada colaborador en función de múltiples indicadores de desempeño.

Sus capacidades de personalización y adaptabilidad a las necesidades de las organizaciones y de cada uno de sus empleados permiten incrementar la motivación y el compromiso, mejorando los niveles de participación y retención, y la incorporación de habilidades prácticas.

  1. Evaluación y seguimiento: ofrece la posibilidad de dar un seguimiento detallado del progreso de los empleados y la evaluación de su desempeño. Los datos recopilados pueden utilizarse para identificar áreas de mejora y ajustar la capacitación en consecuencia. Especialmente a través de la retroalimentación en tiempo real.

En este sentido, desde Deloitte manifiestan que la tecnología permite testear la eficacia del modelo de aprendizaje, pudiendo identificar los puntos de la formación que pueden ser más difíciles. Siguiendo esta línea, sostienen que los procesos pueden ir adaptándose a nuevas necesidades o realidades de la organización, de forma iterativa.

  1. Posibilidad de utilizar tecnología disminuyendo costos: los procesos de realidad virtual se pueden desarrollar sin la necesidad de incorporar visores, reduciendo de esta manera los niveles de inversión. En su reemplazo pueden usarse tablets, incluso en modalidad off line.

Si bien no es inmersivo, mejora la experiencia de ‘aprender haciendo’ exponencialmente respecto del e-Learning tradicional, y con valores muy accesibles por el tipo de dispositivos requeridos para impartir la capacitación

  1. Ahorro de tiempos de capacitación: teniendo en cuenta que por las exigencias del negocio, la cantidad de tiempo disponible para desarrollar instancias formativas es cada vez más escasa. En este contexto, la capacidad de incorporar contenidos de una forma más veloz resulta esencial.
  2. Accesibilidad: permite acceder a un proceso de capacitación en cualquier momento y lugar, facilitando la formación continua y la actualización de habilidades, sin interrumpir la operación normal de la empresa.
  3. Mejora de la retención de conocimientos: a raíz de la inmersión y la experiencia práctica que propone la realidad virtual, los empleados tienden a retener mejor la información y las habilidades adquiridas.

Las simulaciones y las experiencias inmersivas controlan la visión y la atención de las personas. No hay interrupciones ni opciones para realizar múltiples tareas, aseguran los responsables de un reporte de PwC (Estados Unidos) sobre realidad virtual y metaverso en entornos de capacitación.

  1. Competitividad organizacional: las empresas que adoptan esta tecnología se destacan como empleadores innovadores y atractivos, con la posibilidad de mejor sus niveles de atracción y retención de talento.

Potenciando los procesos formativos con tecnologías emergentes

El reporte ‘What does virtual reality and the metaverse mean for training?’, elaborado por los expertos de PwC US, Scott Likens y Andrea Mower, analiza el valor de la realidad virtual en el entrenamiento de habilidades interpersonales, mencionando que el  51% de las empresas se encuentran en proceso de integrar la realidad virtual en su estrategia.

Otras revelaciones del estudio indican que los colaboradores que participan de capacitaciones con realidad virtual tienen más confianza para actuar sobre lo que aprendieron.

Además, el informe señala que los empleados están más conectados emocionalmente con el contenido. Un indicador central, considerando que la conexión emocional es determinante para una incorporación más efectiva de competencias al puesto de trabajo.

Como venimos sosteniendo en artículos anteriores, la realidad virtual demuestra tener un impacto significativo en las capacitaciones corporativas. Ofreciendo enfoques innovadores para la formación empresarial y el desarrollo de habilidades críticas, a través de experiencias inmersivas en entornos simulados, seguros y controlados.

 

La evidencia nos muestra que aplicar tecnología en los procesos formativos, potencia las posibilidades de trasmitir competencias al puesto de trabajo. En especial, favorecen la incorporación de habilidades digitales, hoy consideradas esenciales para desarrollarse en la gran mayoría de los ámbitos profesionales.

De hecho, la aceleración que está experimentando la transformación digital, exige a las empresas a actualizar en forma constante a sus colaboradores, facilitando su adaptación tecnológica. El reloj corre cada vez más rápido, reduciendo el tiempo disponible para reaccionar.

En este contexto, la adquisición de habilidades digitales por parte de la fuerza laboral es sin duda uno de los principales desafíos corporativos para los próximos meses. Más aún, teniendo en cuenta que el trabajo conjunto entre máquinas y seres humanos será cada vez más común.

La investigación de Manpower Group titulada ‘La Nueva era del Potencial Humano’ estima que para 2025 las tareas entre las personas y las máquinas se dividirán por igual. Además, anticipa que el 50% de todos los colaboradores necesitarán volver a capacitarse para ese año.

Lo cual lleva a hacer una reflexión que Luis Guastini, Director General de ManpowerGroup Argentina, perfila con mucha claridad en una nota publicada por Forbes, al señalar que resulta fundamental entender que al hablar de transformación digital no se hace referencia al hardware y al software, sino a la adopción digital y la velocidad con la que las personas dentro de una compañía son capaces de incorporar estas herramientas para hacer su trabajo.

Para que esto ocurra, Guastini plantea dos factores necesarios, que incluso podríamos definir como imprescindibles:

  • Reconocer el valor que le aporta la tecnología.
  • Desarrollar habilidades que no pueden ser suplidas por la tecnología. Entre ellas, la empatía, la capacidad para comprender y resolver problemas y la habilidad de conectar diferentes ideas. También la curiosidad para preguntar continuamente y profundizar en un concepto, y la orientación a resultados para agilizar la respuesta.

En definitiva, trabajar sobre el mindset de las organizaciones y en especial sobre la comprensión que tengan las personas sobre el impacto de la tecnología en sus actividades laborales y en el desarrollo del sistema productivo.

Estamos yendo hacia un modelo en el cual los seres humanos tendremos que trabajar integrados con la tecnología, y en especial con la inteligencia artificial.

Ver a los avances tecnológicos como una amenaza, será un obstáculo de magnitud para adaptarse al mundo que viene y un problema para la productividad y competitividad de las empresas.

Por el contrario, entenderlos como una oportunidad para la optimización del tiempo, para la facilitación de las tareas laborales y para la incorporación de  mayor valor agregado, colocará a la fuerza laboral en una mejor posición de adaptación en relación a la transformación digital.

Digital skills: la importancia de entender sus implicancias

La incorporación de habilidades digitales no solo impacta sobre la capacidad de adaptarse con éxito al cambio tecnológico y a las nuevas dinámicas productivas. También incide en la posibilidad de incorporar innovaciones que permitan acelerar precisamente la incorporación de esas competencias vitales para progresar.

Para expresarlo en forma gráfica: la dinámica productiva del huevo y la gallina, en formato tecnológico.

Un ejemplo concreto puede observarse en la incorporación de la realidad virtual a los procesos de capacitación corporativos.

El estudio ‘¿Qué significa la realidad virtual y el metaverso para el entrenamiento?’ desarrollado por PwC, muestra algunos hallazgos sobre el valor de la realidad virtual en el entrenamiento de habilidades interpersonales.

El reporte expresa que las personas que participan en cursos de realidad virtual pueden:

  • Capacitarse hasta cuatro veces más rápido.
  • Tienen más confianza para aplicar lo que se les enseña.
  • Se muestran más conectados emocionalmente con los contenidos.
  • Están más enfocados.

Los autores del informe de PwC, Scott Likens y Andrea Mower, consideran que el aprendizaje a través de la realidad virtual, dentro y fuera del metaverso, incluye los elementos clave para enfrentar los desafíos actuales, con una experiencia centrada en el ser humano, y una tecnología que aumenta la productividad sin sacrificar la calidad.

 

Página 1 de 3