La capacitación inmersiva ofrece a las empresas una potente herramienta para mejorar la eficacia de sus programas de capacitación.

Al sumergir a sus colaboradores en entornos que replican situaciones del mundo real, proporciona experiencias de aprendizaje envolventes y prácticas, que mejoran los niveles de incorporación de competencias críticas.

La realidad extendida (virtual o aumentada) y el trabajo con gemelos digitales, mejoran la retención de información, y permiten a los participantes aplicar habilidades y tomar decisiones en un contexto simulado, preparándolos de manera más efectiva para enfrentar desafíos reales en su trabajo.

Además, las capacitaciones inmersivas permiten desarrollar programas de formación más personalizados y adaptables a las necesidades de los equipos y de la organización.

Al tratarse de herramientas versátiles, pueden adecuarse a diversas industrias y áreas, desde grandes superficies hasta compañías mineras y empresas manufactureras.

Veamos los 11 factores que justifican procesos formativos inmersivos en las empresas:

1. Desarrollo de habilidades sociales: puede incluir interacciones con personajes virtuales o compañeros de aprendizaje, lo que facilita el desarrollo de habilidades sociales y de trabajo en equipo.
2. Personalización del aprendizaje: permite adaptar la experiencia de aprendizaje según las necesidades individuales de cada participante, ofreciendo rutas personalizadas o escenarios específicos.
3. Mejora en la toma de decisiones: al simular situaciones complejas, la capacitación inmersiva brinda a los participantes la oportunidad de practicar la toma de decisiones bajo presión, mejorando su capacidad para enfrentar desafíos en el mundo real.
4. Facilita la empatía: en entornos de realidad virtual, por ejemplo, los participantes pueden experimentar perspectivas diferentes, promoviendo la empatía y la comprensión de diversos puntos de vista.
5. Optimización del tiempo de entrenamiento: puede ser más eficiente en términos de tiempo, ya que los participantes pueden aprender y practicar habilidades específicas de manera concentrada y efectiva.
6. Medición del rendimiento: las tecnologías de capacitación inmersiva permiten recopilar datos sobre el rendimiento de los participantes, lo que facilita la evaluación y mejora continua del programa de capacitación.
7. Fomenta la motivación: al proporcionar una experiencia de aprendizaje más emocionante y envolvente, puede aumentar el interés, entusiasmo y compromiso de los participantes para participar y aprender.
8. Incorporación de la gamificación: la introducción de elementos de juego, como desafíos, recompensas o competiciones, puede hacer que el proceso de aprendizaje sea más divertido y atractivo.
9. Preparación para emergencias: es especialmente valiosa en situaciones donde la preparación para emergencias es crucial, ya que permite simular y practicar respuestas a escenarios críticos de manera segura.
10. Preparación para el futuro del trabajo: con el avance de la tecnología, prepara a los profesionales para afrontar los desafíos y las demandas cambiantes del futuro del trabajo de manera más efectiva.
11. Promoción de la innovación: permite experimentar con nuevas tecnologías y enfoques en un entorno controlado antes de aplicarlos en situaciones reales.

Cerrando el análisis es importante recordar que las simulaciones y experiencias inmersivas comprometen múltiples sentidos de las personas al mismo tiempo. Lo cual favorece la capacidad de hacer foco en competencias y comportamientos, para mejorar sus niveles de incorporación por parte de los colaboradores y su posterior transferencia al puesto de trabajo.