Vivimos tiempos de profunda transformación en los cuales las empresas deben adaptar sus puestos de trabajo a las dinámicas impuestas por una nueva realidad, signada por la Cuarta Revolución Industrial y acelerada por la pandemia.
Conforme avanzan las semanas y persiste la pandemia, la incorporación de nuevas modalidades de gestión laboral afianza prácticas como el home office. No son pocas las empresas –incluso grandes compañías industriales- que están considerando la posibilidad de institucionalizar el trabajo remoto para todos aquellos puestos que no requieran de presencia física y puedan desarrollarse a distancia.
Podemos definir a una empresa como una organización dedicada a actividades comerciales destinadas a satisfacer las necesidades de bienes y/o servicios demandados por la sociedad, con fines económicos.
En mi artículo previo ‘10 claves para desarrollar procesos de home office efectivos’, analizábamos una decena de prácticas ideales para tener en cuenta cuando debemos trabajar en forma remota desde el hogar.
Frente al crecimiento de la pandemia del Covid-19 en todo el mundo, la decisión de algunos gobiernos por implementar períodos de cuarentena y la determinación de muchas empresas por disponer el trabajo remoto para resguardar la salud y seguridad de sus colaboradores, imponen la masividad del home office.
Hace un par de semanas hablábamos de la alteración de la presencialidad en un mundo que comenzaba a experimentar la diseminación del coronavirus Covid-19 por varios continentes. 16 días más tarde la infección ya es global, y comienza a adquirir características de pandemia, con la aparición de casos en América Latina.
Las formas de acceso a la información y al conocimiento cambiaron radicalmente en los últimos años. En paralelo, los tiempos de atención de las personas se redujeron. Es por ello que hoy los contenidos deben ser móviles, breves, claros y concisos. En este contexto, el micro learning es cada vez más eficiente y determinante para el éxito de los procesos formativos en empresas y grandes organizaciones.
Si bien el coronavirus aún no es una pandemia y tanto la Organización Mundial de la Salud como los gobiernos de los países que cuentan con personas enfermas en su territorio trabajan para contener el brote, la presencialidad se ha visto alterada.
Para desarrollar experiencias de cliente exitosas es imprescindible generar experiencias de empleado eficientes, teniendo en cuenta la interconexión que existe entre ambas y el impacto de su adecuada armonización en los resultados de una empresa.
Para desarrollar experiencias de cliente exitosas es imprescindible generar experiencias de empleado eficientes, teniendo en cuenta la interconexión que existe entre ambas y el impacto de su adecuada armonización en los resultados de una empresa.